Este miércoles se celebró el cuarto Panel de experiencia y participación que se realizó en Albacete
El Congreso “La Iglesia en la Educación” ha continuado esta miércoles con el cuarto Panel de experiencia y participación que se emitió en directo desde Albacete. De esta forma se continua con este Congreso, organizado por la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura, que tendrá su sesión final el 24 de febrero en Madrid. El tercero de los temas abordados han sido los centros de formación profesional de ideario cristiano.
El evento estuvo moderado por la directora de Comunicación de Escuelas Católicas, Victoria Moya, y el primer turno de intervención versó sobre la escolarización de población vulnerable. Miguel Martínez, del Colegio El Ave María de Albacete, indicó que «nuestro colegio desarrolla una labor humana, social, formativa, cultural y cristiana, que impregna todas las acciones del personal humano tanto seglar como religioso. Todas las personas que interactuamos en el entorno vecinal y en el Centro en concreto, deseamos que nuestra labor vocacional y humana vaya enfocada al progreso de nuestras familias para que vayan saliendo de una vida encaminada a la mendicidad, a la ausencia de sacrificio para conseguir metas, al dinero fácil y a las nulas pautas de convivencia para coexistir con los demás».
«Es imprescindible el trabajo cooperativo con entidades y organismos que interactúan en nuestros proyectos particulares de Centro, en especial la Iglesia Católica en su diócesis de Albacete, quién apoya el centro en todas las dimensiones necesarias. Todas las acciones, proyectos y programaciones que vayan encaminadas a impulsar el futuro de este colectivo, tienen cabida en este ambiente donde se desenvuelve nuestra labor profesional, vocacional y solidaria. En este punto la Educación en Valores y el trabajo profesional en equipo toman toda su razón de ser».
Teresa Puchades Girbés, de la Escuela Trilema Avenida América, explicó que «nuestra visión pastoral se concreta en cuatro grandes pilares. Vivimos un momento especial, lleno de posibilidades y de esperanza. La escuela sueña un mundo futuro que la inspira y vertebra. La pastoral no puede quedarse atrás. La Iglesia debe soñar una escuela que, generosa, desvele al mundo la vida del Reino que muchos gustamos ya».
«Estimular el liderazgo pedagógico»
«Es fundamental estimular el liderazgo pedagógico, de gestión, intelectual, pero también el liderazgo moral y espiritual que prepare a aquellos que deben conducir los cambios que deseamos, les dote de los medios y las redes de apoyo necesario. Y crear Redes de Centros, de micro y macrosistemas que trabajen juntos, compartan sus experiencias y dificultades y evalúen sus logros y fracasos».
Rosalía Tejo, del Col·legi Santíssima Trinitat de Barcelona, afirma que «es un regalazo oír a padres, vecinos la importancia de nuestra presencia y servicio en el barrio. Ayuda a que éste sea mejor. Al salir del colegio, es cierto, salen niños y niñas con sus edades, unos más relajados, más revolucionados… que otros; pero, por lo general, son criaturas que saben estar en la calle, respetar a sus vecinos/as. Hay que seguir avanzando en su compromiso por mejorarlo». Juan Antonio Perteguer Muñoz, del Colegio Edith Stein de Madrid, expuso que la experiencia de su Colegio en Orcasitas «tiene como objetivo principal transformar vidas y brindar esperanza a sus alumnos a través de una educación integral que se basa en valores cristianos, teniendo presente la diversidad religiosa y cultural presente en la comunidad. Todo ello con una predilección especial por los más necesitados. El planteamiento educativo de esta experiencia transformadora se sustenta en varios pilares clave».
El segundo de los bloques trató la innovación educativa e identidad cristiana. Laura Noguera Abad, del Colegio Madre Alberta Palma de Mallorca, quien explicó que «para llevar a cabo nuestra misión contamos con un Plan Estratégico que surge de las líneas estratégicas propuestas por nuestra congregación para un periodo de 6 años. Integra la pedagogía y la Pastoral, que es vital en todas nuestras obras. Ésta vertebra todo lo que hacemos y vivimos. Entre las diversas propuestas que tenemos, contamos con unos talleres de experiencia de fe que es lo que hoy expondremos. Con ellos buscamos ayudar al alumnado en su crecimiento personal de todas sus dimensiones: intelectual, emocional, afectivo-sexual, espiritual y social». Jordi Cabanes Rodríguez, del Colegio Abat Oliba Spínola de Barcelona, afirmó que «después de años de vivir educando un amigo nos preguntó si teníamos algún texto y nos dimos cuenta que no. Al disponernos a ponerlo por escrito, descubrimos un factor común en todos nuestros maestros: en el fondo imitaban el método educativo de Dios con su pueblo y sus hijos y lo que escribimos fue una breve enumeración de sus características».
Jorge Barrera Martín y Jorge Sastre Santamaría, del Colegio Diocesano Asunción de Nuestra Señora de Ávila, presentaron un «proyecto enmarcado dentro del Plan Digital de Centro en el que cada alumno dispone de su propio dispositivo digital como una herramienta importante de aprendizaje, individualizando la enseñanza desde un punto de vista innovador y situando a la persona como centro desde una concepción humanística y cristiana del hombre».
Teresa López Montes, del Colegio Juan Pablo II de Alcorcón, presentó un proyecto basado en un viaje a Covadonga. «El objetivo es ofrecerles una actividad de convivencia y lúdica, pero con un contenido más profundo atendiendo a su formación tanto en su desarrollo personal como espiritual. Para eso, el viaje está guiado por profesores que conocen, nuestro capellán, que garantiza y misa diaria, y monitores de confianza que son antiguos alumnos del colegio y hace que los alumnos se identifiquen con ellos y se vinculen».
El último de los bloques fue sobre los sujetos eclesiales titulares de colegios. Judit Margalef y Joan Mascarell, del Colegio Diocesano Sagrada Familia de Tortosa, presentaron el proyecto EUKAIRIA. «Con esta palabra griega que significa “oportunidad” se resume el proyecto educativo de nuestro colegio. DESCUBRIR Y EXPERIMENTAR es uno de los objetivos en todas las etapas educativas; hemos creado espacios que lo facilitan, como son el Atelier, el Emocionarium, el Aula creativa, el laboratorio, el huerto… y hemos incorporado trabajos por proyectos en todas la etapas. El CONTACTO CON LA NATURALEZA Y EL DEPORTE son fuente de salud y de concienciación ambiental. Nuestros alumnos participan desde 1º de primaria hasta 2º de bachillerato de unos días de convivencias en los que se trabaja el lema del curso, se hacen excursiones por el Monte Caro, dinámicas de cohesión de grupo, eucaristías, reflexiones enmarcadas en el trabajo de los valores del Evangelio… Además tenemos un grupo excursionista que organiza actividades en plena naturaleza para alumnos y familias durante el curso».
Por último, Juan Ramón de la Serna y Carbajo, del Colegio Internacional J. H. Newman indicó que «la experiencia del colegio Newman tiene el valor principal en el ideal compartido que sostiene el claustro docente y que se expresa fundamentalmente en la tarea principal de un centro, que es la de enseñar. Es a través de las disciplinas académicas y del propio currículo como se plasma la identidad de un centro, que junto con la cultura del colegio expresan una mirada y un juicio sobre la vida y la realidad».