«Pedimos perdón por todo el mal y daño que esta situación ha creado dentro de la Familia Franciscana, en los cristianos del mismo pueblo de Belorado y en general en todos los cristianos de buena voluntad», recogen en un comunicado la Federación de Clarisas de Nuestra Señora de Arantzazu y el provincial de los franciscanos de la Provincia de Arantzazu
La Federación de Clarisas de Nuestra Señora de Arantzazu —a través de su presidenta, la hermana Javier Soto— y la Provincia de Arantzazu de los franciscanos —a través de su presidente, Joxe Mari Arregui— han pedido este jueves a las clarisas de Belorado que reconsideren su postura.
«Pedimos a las hermanas clarisas de Belorado que reconsideren su postura, disciernan su doctrina de acuerdo a los modos franciscanos de comunión y fraternidad y con humildad franciscana vuelvan a lo que siempre han sido», recogen en un comunicado conjunto que hacen en nombre del Ministro General de la Orden, Massimo Fusarelli.
En él, manifiestan «sorpresa y dolor ante la actitud, escritos y comentarios que nuestras hermanas clarisas de Belorado han realizado en estos últimos días, por su dura crítica a la Iglesia Católica y especialmente por su Manifiesto Católico de 70 páginas, un compendio de críticas infundadas e interpretaciones erróneas».
Del mismo modo, transmite a las propias clarisas de este monasterio que «siempre nos tendrán dispuestos a acogerlas de nuevo en nuestra familia, de la que también ellas forman parte y de la que nunca debieron marchar».
También piden perdón por todo el mal y daño que esta situación ha creado dentro de la Familia Franciscana, en los cristianos del mismo pueblo de Belorado y en general en todos los cristianos de buena voluntad.
Con todo, manifiestan su total y fraterna comunión con la Iglesia, con el Papa Francisco, con el arzobispo de Burgos, Mario Iceta y con Juan Carlos Elizalde, obispo de Vitoria.