La diócesis de Málaga se persona como acusación particular en la causa abierta contra el sacerdote que agredió sexualmente a varias mujeres. Lo hará como parte perjudicada, ha comunicado esta sede episcopal a través de un comunicado.
«La petición se ha trasladado hoy al procurador, a la espera de que este la presente a la mayor brevedad ante el Juzgado que instruye el caso», ha añadido.
Además, la diócesis ya ha iniciado el procedimiento para la expulsión del estado clerical de dicho sacerdote, según la normativa canónica. Y añade que espera que estas acciones contribuyan «a la investigación y al bien de los fieles cristianos, al tiempo que se esclarece la verdad de los hechos».
También ha reiterado, como hizo en días anteriores, su dolor por el daño cometido y su cercanía a las víctimas, su condena más profunda y contundente a toda forma de abuso a la mujer y su disposición a seguir colaborando con la justicia para cuantas gestiones sean necesarias con el fin de facilitar la investigación.
«Seguimos rezando a Dios por las víctimas, a quienes continuamos manifestando nuestra cercanía y apoyo», ha concluido.