«Hoy la política no tiene buena fama: corrupción, escándalos, alejada del día a día de las personas», ha afirmado Francisco en una nueva edición de El Vídeo del Papa
El papa Francisco dedica su intención de oración de este mes de agosto a los líderes políticos. Reza el Pontífice para que «estén al servicio de su pueblo, trabajando por el desarrollo humano integral, trabajando por el bien común, atendiendo a los que han perdido su empleo y dando prioridad a los más pobres».
Francisco reconoce que «la política no tiene buena fama», algo que achaca a la corrupción, los escándalos o mantenerse alejada del día a día de las personas. «Pero, ¿podemos avanzar hacia la fraternidad universal sin una buena política? No.», añade en una nueva edición de El Vídeo del Papa.
Así, recuerda que, como ya dijo Pablo VI, la política es «una de las formas más altas de la caridad, porque busca el bien común». Y agrega: «Hablo de la política con mayúsculas, no de la politiquería. Hablo de la política que escucha la realidad, que está al servicio de los pobres, no de la que está encerrada en grandes edificios con largos pasillos».
Esta política verdadera es la que también está pendiente de los desempleados y sabe muy bien «lo triste que puede ser un domingo cuando el lunes es un día más sin poder ir a trabajar».
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«Si la vemos así, la política es mucho más noble de lo que aparenta. Agradezcamos a los muchos políticos que desempeñan su tarea con voluntad de servicio, no de poder, todos sus esfuerzos por el bien común», concluye.