Les ha pedido que hagan vida la liturgia cotidiana para que cuide y nutra la relación con Dios
El papa Francisco ha recibido este viernes a miembros del Instituto Superior de Liturgia de Barcelona, vinculado al Ateneo Universitario Sant Pacià, a los que ha pedido que reflexionen sobre la unión con Dios y los medios que Él nos ha dado para alcanzarla.
«La liturgia nos recuerda además que este encuentro en torno a Dios es de todos. […] El hombre es para la liturgia, porque es para Dios, pero una liturgia sin esta unión del hombre con Dios, es una aberración. Y aquí una aberración, por ejemplo, sería una liturgia esclava del rubricismo que no favorece la unión con Dios», ha subrayado en su discurso.
Francisco ha subrayado, además, un criterio de san Benito para ver si se busca verdaderamente a Dios: «Que el candidato esté pronto para la obra de Dios, para la participación en la liturgia divina, en su sentido de encuentro persona y comunitario con Dios».
También ha subrayado la urgencia del servicio, de vivir el mandato supremo del amor fraterno, en lo que Dios nos pida, de abrazar la cruz, «dejándose modelar por Dios y tocando la llaga abierta en los miembros de su cuerpo místico».
«Les pido, por tanto, trabajar para hacer vida nuestra liturgia cotidiana, para que exprese, cuestione y nutra esta relación. De esa forma, nuestras comunidades serán tabernáculos de Dios entre los hombres, que buscan en su oración el invisible latido del corazón del Esposo», ha explicado.
