Mientras los líderes del mundo se dan cita en Dubái para la cumbre internacional sobre el cambio climático, a último momento el papa Francisco tuvo que anular su participación debido a una infección pulmonar. Sin embargo, envió a su secretario de Estado, el cardenal Parolín, quien leyó el mensaje pontificio con la propuesta de crear un fondo económico para no gastar en armas, sino en alimentos y en el clima.
Estos días, los medios de comunicación estuvieron muy atentos al estado de salud del Pontífice y a su agenda de trabajo, ya que realizó algunas actividades públicas y privadas. Entre estas destacó la reunión con los obispos españoles convocados al Vaticano y que había originado muchas conjeturas sobre las temáticas que abordarían, pero, tras el encuentro, el mismo secretario de la Conferencia Episcopal explicó que el tema central había sido la formación de los futuros sacerdotes y que el clima fue bastante fraternal. Así que algunos periodistas, profetas de desventuras, tuvieron que desmentir sus cábalas fatalistas.
Por otro lado, esta semana grandes corporaciones mediáticas como la BBC o New York Times trataron una noticia que no es oficial, pero que no fue desmentida por los medios vaticanos. El hecho es que el Pontífice habría amonestado al cardenal Burke privándole de su apartamento y de lo que se conoce como el plato cardenalicio, que es una contribución económica a todos los cardenales, quienes por definición son los colaboradores más cercanos del Papa.
Al respecto solo se conocen versiones de portavoces oficiosos y, mientras la noticia se aclare, es necesario comentar que en la Curia Vaticana es normal que cuando termina el mandato oficial de una autoridad, el apartamento gratuito que acompañaba el cargo sea restituido o el prelado pague el alquiler. Esta fue una práctica normal que nunca ocupó titulares.
Sin embargo, es un hecho que el purpurado, en los últimos tiempos, ha subido el tono de sus críticas, por ejemplo, semanas antes de la asamblea del sínodo, había escrito el prólogo de un libro con el título El proceso sinodal: una caja de pandora, y miles de ejemplares fueron enviados a cardenales, obispos y sacerdotes de todo el mundo.
En estos últimos días, algunos analistas serios se preguntaban si el Papa no había esperado mucho para poner un alto a estos hechos que afectan a la unidad de la Iglesia, mientras que otros creen que este tipo de decisiones podrían ahondar más las diferencias.
Gracias a Dios, la vida de la Iglesia va más allá de estas dinámicas, sobre todo, en un tiempo en el que comenzamos a prepararnos para la Navidad. En una época de tanta violencia y de guerras olvidadas, los sacerdotes de la comunidad de Belén en Palestina han hecho saber que este año no habrá grandes celebraciones en el lugar en el que Jesús nació.
En otro lugar del mundo, en Nicaragua, el régimen orteguista exhibió 34 fotos y un vídeo del obispo Rolando Álvarez, que sigue encarcelado por causas políticas.
Asimismo, este domingo, en el rezo del ángelus, además de exhortar al cese de la violencia entre Israel y Gaza, el Papa recordó a las víctimas de un atentado en una iglesia de Filipinas mientras celebraban la Misa del sábado 2 de diciembre.
Posdata
El jueves 30 de noviembre, el Papa Francisco recibió en audiencia a los miembros de la Comisión Teológica Internacional y en su discurso dijo que «La Iglesia es mujer y que uno de los grandes pecados que hemos cometido es masculinizar’ a la Iglesia», por lo que es necesario desmasculinizarla, y hacerlo a partir de la teología.
Esperamos que los teólogos nos expliquen esta nueva palabra.
Ariel Beramendi es sacerdote y comunicador