El arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha presidido la Eucaristía de la tercera jornada de este gran evento que se celebra en Sevilla
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Luis Argüello, señaló este viernes desde Sevilla que la Iglesia, y las hermandades y cofradías en particular, están llamadas a ser casa de hospitalidad. «Hospitalidad —dijo— que acoge lo divino y lo humano».
El también arzobispo de Valladolid hizo esta reflexión al hilo del Día de la Constitución durante la homilía en la Eucaristía de la tercera jornada del Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, que se celebra en Sevilla hasta este domingo. Concelebraron, entre otros, el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, y el arzobispo de Granada, José María Gil Tamayo.
«¿Qué puede ofrecer la Iglesia, las hermandades y cofradías a la hora de contribuir a que nuestra nación crezca y viva lo que significa la dignidad de todos, lo que significa el bien común, el diálogo, superar polarizaciones y enfrentamientos?», se preguntó.
Además de ser una casa de hospitalidad, también propuso ofrecer experiencias de amistad civil y social y de fraternidad espiritual, además de una mirada especial sobre los que sufren.
«Llevemos la alegría del Evangelio que se hace luz. Experimentemos el consuelo del Señor para consolar. Consolados, salgamos a consolar», concluyó.
