El papa Francisco recibió este miércoles en la Nunciatura Apostólica de Lisboa a 13 víctimas de abusos de sacerdotes portugueses. El encuentro se llevó a cabo «en un clima de escucha intenso» y se prolongó durante más de una hora.
«En la tarde de hoy, después de los encuentros institucionales y con la Iglesia, el papa Francisco recibió en la Nunciatura a un grupo de 13 persona, víctimas de abusos por parte de miembros del clero, acompañados por algunos representantes de instituciones de la Iglesia portuguesa, responsable de la protección de los menores», se puede leer en la nota de prensa publicada por la Santa Sede.
El pontífice ya se había referido a esta lacra durante el rezo de las vísperas con obispos, sacerdotes, religiosas y agentes de pastoral del país luso en el monasterio de los Jerónimos, cuando dijo que la desilusión y la rabia hacia la Iglesia se alimenta a veces «por nuestro mal testimonio y por los escándalos que han desfigurado su rostro y que llaman a una purificación humilde y constante, partiendo del grito de dolor de las víctimas, que siembre han de ser acogidas y escuchadas».
La Iglesia de Portugal ya ha hecho un camino sobre esta cuestión, con la creación de una Comisión Independiente para el Estudio de los Abusos Sexuales de Menores, liderada por el psiquiatra Pedro Strecht y que el pasado mes de febrero presentó sus resultados. El trabajo de investigación validó 521 testimonios y estimó en 4.815 el número de víctimas. Con estos datos, la Conferencia Episcopal Portuguesa creó el Grupo Vita para atender a las víctimas.
