La Santa Sede y Vietnam certificaron este jueves el Acuerdo sobre el Estatuto del Representante Papal Residente y la Oficina Papal Residente en Vietnam. La consecuencia primera es que el país asiático tendrá un representante pontificio en Hanói, la capital. Hasta el momento ejercía desde Singapur.
Así lo anunciaron, según relata Vatican News, en una declaración conjunta tras el encuentro que mantuvieron en el Vaticano el Papa Francisco y el presidente de Vietnam, Vo Van Thuong. Una visita que se enmarca en el trabajo conjunto que vienen haciendo las delegaciones de ambos países en los últimos tiempos.
Tal y como recoge el comunicado, las dos partes manifestaron su alegría por el progreso de las relaciones entre Vietnam y la Santa Sede, así como la aportación de la comunidad católica al país.
«Las partes expresaron su confianza en que el representante pontificio residente cumplirá el papel y el mandato que se le confiere en el acuerdo», subraya. Esto es, «proporcionará apoyo a la comunidad católica vietnamita en el espíritu de la ley y, siempre inspirado por el magisterio de la Iglesia, para cumplir con la vocación de acompañar a la nación y ser buenos católicos y buenos ciudadanos, y contribuir al desarrollo del país». Y concluye: «El representante será un puente para avanzar en las relaciones entre Vietnam y la Santa Sede».
