Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

Un viaje Por Tantos: milagros cada día gracias a tus impuestos 

La campaña del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia de la Conferencia Episcopal recorre España mostrando la ingente labor social y espiritual de la institución a 15 personas que no marcan la X en la declaración de la renta

El mediodía en Toledo alterna sol, viento y lluvia con la naturalidad con que acoge a las tres culturas milenarias. El autobús celeste de Xtantos se detiene a las afueras de la ciudad con los intermitentes activados, contra un horizonte frío y luminoso. Busca un paisaje impersonal, donde dos mujeres protegidas puedan ofrecer sus testimonios sin correr ningún riesgo. Carolina y Melinda sufrieron malos tratos hasta que fueron acogidas en Rompe tu silencio, un proyecto de ayuda a la mujer de la archidiócesis de Toledo. Hoy, viven con sus hijos en un piso de acogida de Cáritas y están acompañadas en sus necesidades por trabajadores sociales, educadores y psicólogos.

Rompe tu silencio es una parada importante de la iniciativa Un viaje Por Tantos. Esta campaña, impulsada por el Secretariado para el Sostenimiento de la Conferencia Episcopal, ha recorrido 1.200 kilómetros mostrando a 15 personas que no marcaban la casilla a favor de la Iglesia en la declaración de la renta la ingente labor social y espiritual a la que se dedica el dinero recaudado en el IRPF. «Nuestro proyecto se financia a través del IRPF, pero con esto no llega. El Arzobispado nos tiene que dar dinero para poder continuar, porque no es suficiente para mantener la vivienda, el personal, los gastos de gestión…», detalla a ECCLESIA Virginia Sanz, responsable de Rompe tu silencio. «Nos faltan recursos, y muchos. Está claro que con lo que tenemos es con lo que hacemos. Si yo no doy más de mí misma, me apoyo en mi equipo y las cosas van saliendo. Nos falta personal y con más fondos podríamos hacer un mejor trabajo, sí, pero lo hacemos lo mejor posible», agrega Virginia, que ha enseñado a los 15 viajeros el piso de acogida y su labor integral de cada día.

—¿Y cuál ha sido su reacción, teniendo en cuenta que son personas que voluntariamente no quieren ceder esta parte mínima de sus impuestos?

—Muy buena. Personalmente —continúa Virginia—, me he fijado en un señor que se sorprendía de que solo tuviéramos un piso de acogida. «¿Cómo es posible que todo este trabajo que hacéis sea solo en un piso, en uno solo?», me preguntó. La vivienda está dentro de un edificio de Cáritas donde hay familias de otros proyectos, en otras realidades de exclusión, y ellos se creían que todo era para violencia de género. «Es que esto vale mucho dinero. Ojalá tuviéramos medios para acoger a muchas más personas que lo necesitan», le he respondido yo. 

El proyecto Rompe tu silencio cuida y acompaña a mujeres víctimas de violencia y a sus hijos menores, mediante un recurso doble: un piso de acogida para personas que han tenido que huir de sus maltratadores y una oficina que ayuda en cualquier ámbito de la vida diaria, desde acompañar al médico o al juzgado a una víctima hasta cumplimentar una matrícula del colegio. El año pasado, atendieron a 50 mujeres y a más de 70 niños. «No es tanto que exista un aumento alarmante del número de casos, que es cierto que aumentan, sino la complejidad de los mismos. Cada vez se requiere un trabajo más intensivo, más tiempo, más personal», explica Virginia. «Es un trabajo a largo plazo. Hay que crear un vínculo, ella tiene que confiar en ti. Por ejemplo, cuando las acompañas al juzgado o al médico, están mucho más tranquilas que si tuvieran que ir solas», añade. 

Un Viaje Por Tantos visitó Guadalajara, Alcalá de Henares, Segovia, Pozuelo de Alarcón, Getafe y Toledo entre el 19 y el 23 de febrero. Esta ruta permitió a los 15 participantes conocer de primera mano el servicio de la Iglesia en la España vaciada, en la acogida a personas sin hogar, en el cuidado de personas con discapacidad física, intelectual y sensorial severa o en la reinserción social de las personas encarceladas. Para José María Albalad, director del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia, «ha sido una experiencia transformadora». «Por eso me gusta hablar de un doble viaje: el visible, de 1.200 kilómetros, y un viaje interior fruto del conocimiento de realidades muy diversas que tocan el corazón. Me atrevería a decir que nos ha removido a todos, en positivo, al ver este servicio social y espiritual de enorme calado», añade. 

Los participantes de este primer Viaje Por Tantos han sido ocho mujeres y siete hombres de edades comprendidas entre los 19 y los 61 años, sin relación alguna entre ellos. Tras más de 200 solicitudes, fueron elegidos un comercial, una médico, una profesora de inglés, una coordinadora, una psicóloga, un ilustrador, una camarera, una animadora infantil, una persona dependiente, un transportista, una diseñadora gráfica, tres estudiantes y una persona en situación de desempleo.

Aparentemente, solo tenían en común el hecho de que ninguno de ellos marcaba la casilla a favor de la Iglesia en su declaración de la renta. Este era el único requisito para participar en la campaña. Según el departamento dirigido por José María Albalad, las motivaciones esgrimidas para no marcar la X a favor de la Iglesia van desde la desconfianza a no fijarse, pasando por el hecho de no ser creyente, por desconocimiento, por no tener una buena imagen o no estar de acuerdo con la Iglesia, por asignar ya a las ONG, por falta de interés y no saber a qué se destina el dinero, o porque no considera que la Iglesia haga una labor fundamental en la sociedad. 

Por ello, el objetivo de esta campaña era ofrecerles la oportunidad de ver en primera persona el servicio que la Iglesia ofrece a la sociedad española los 365 días del año. «Les he dicho que si tienen alguna duda, que pregunten», revela Virginia Sanz. «Aquí hay total transparencia, justificamos cada euro de gasto: facturas de luz, gas, ayuda para alimentos, ropa… Podemos sacar al céntimo todos los gastos anuales del proyecto. Cáritas tiene un portal de transparencia donde se ve a qué se destina todo el dinero, que es algo que no puede estar más alejado de los chascarrillos que se oyen en la calle. Gastamos de manera muy austera, y con poco personal hacemos muchísimo. Por otro lado, cualquiera puede conocer nuestro trabajo de primera mano, invitamos a que se interesen por ello», añade.

La confianza ha sido clave en toda la campaña, pues José María Albalad también destaca que «los participantes han preguntado todo lo que han considerado, e incluso han tenido la oportunidad de discrepar o mostrar algunas críticas a la institución, pero en un clima de respeto y diálogo que no siempre se da en una sociedad tan polarizada». Desde el primer momento, «el grupo ha logrado una cohesión e interés que, sinceramente, ha sido ejemplar. Ahora, el reto es poner en orden todo el material —tenemos más de 100 horas de grabaciones— y editarlo para que esta experiencia pueda llegar a millones de personas dentro de unas semanas —a partir de esta iniciativa se materializará la campaña de la renta 2024—, pero el viaje ha superado todas las expectativas», reconoce. 

En 2022, el importe total asignado por los contribuyentes españoles a la Iglesia a través de la declaración de la renta ascendió a 358,8 millones de euros, un 11,9 % más —38 millones— que el ejercicio anterior. Además, se estableció la cifra récord de 7.631.143 declaraciones con la X marcada en un solo año. «Son datos económicamente buenos», en palabras del vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal, Fernando Giménez Barriocanal. Por su parte, el propio José María Albalad señala que «los datos de la X son muy buenos para la Iglesia y extraordinarios para la sociedad».

Como aspecto negativo, el porcentaje total de personas que no marca la X de la Iglesia con relación al total ha descendido un 0,3 %. Por ello, el director del Secretariado para el Sostenimiento insiste en que «la Iglesia quiere estar también cerca de estas personas, vamos a trabajar duro para ganarnos su confianza, porque la confianza no se pide, se gana». Un Viaje Por Tantos se enmarca dentro de este compromiso. Rompe tu silencio, decíamos antes, era una parada importante en la campaña, en primer lugar, porque «la gente se hace una idea de la labor de la Iglesia pensando en lo que hacen las monjitas, que es genial, entregar su vida, nada menos, pero también está muy bien que se vea que hay una atención profesionalizada, que hay profesionales cuidando, atendiendo y dando soluciones a partir de ese dinero», explica Virginia Sanz. Y, en segundo, porque la visita al centro para mujeres maltratadas fue la última parada antes de que los 15 participantes tomaran la decisión definitiva sobre si seguirán dejando en blanco la casilla 105 o si, por el contrario, comienzan a marcar la X de la Iglesia. En el próximo número de ECCLESIA, nuestros lectores podrán disfrutar de una entrevista con una de estas personas, toda vez que haya tomado su decisión.

—Y los organizadores, ¿qué han aprendido de los participantes?

—Somos una Iglesia de puertas abiertas y debemos salir al encuentro de la gente —indica Albalad—. «Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades», nos dice Francisco en Evangelii gaudium. En este sentido, Un viaje Por Tantos ha tendido la mano y construido un puente con personas alejadas de la fe y de la Iglesia, visitando las periferias físicas y existenciales de las que nos habla el Santo Padre. Uno no puede amar lo que no conoce. Este viaje nos ha permitido recordar la importancia de ser punto de encuentro, de escuchar al otro. Ha sido una experiencia única que nos ha enriquecido a todos, no solo a los viajeros. 

This Pop-up Is Included in the Theme
Best Choice for Creatives
Purchase Now