El Papa Francisco ha firmado el decreto de canonización con el que aprueba el milagro para elevarle a los altares. También serán canonizados José Allamano, fundador de los Misioneros de la Consolata y un grupo de franciscanos martirizados en Damasco en 1860.
El 8 de julio de 2022, una mujer costarricense, Liliana, acude en peregrinación a la tumba de Carlo Acutis en Asís. Su hija lleva seis días ingresada en el hospital Careggi de Florencia con un traumatismo craneoencefálico muy grave, tras un accidente de bicicleta. Ha pasado esos seis días rezando al beato Acutis, y ahora le entrega una carta.
Ese mismo día, el hospital informa de que la niña ha empezado a respirar por sí misma. Durante diez días realiza progresos inexplicables: vuelve a moverse, a hablar. El 18 de julio la tomografía está limpia, no hay restos de hemorragia. El 2 de septiembre, dos meses después del accidente, va ella misma a la tumba en Asís a dar las gracias por el milagro.
La Santa Sede ha reconocido ahora este milagro con la publicación del decreto correspondiente. Será canonizado en un consistorio, con fecha aún por determinar, junto a Giuseppe Allamano, Marie-Léonie Paradis y Elena Guerra.
Hasta entonces, Acutis seguirá siendo venerado a nivel local, pero aun así, Domenico Sorrentino, obispo de Asís-Nocera, ha expresado su «alegría con exultación en unión con su familia, especialmente con su padre Andrea y su madre Antonia».
Acutis falleció el 12 de octubre de 2006 como consecuencia de una leucemia, a los 15 años. Murió con fama de santidad, tras realizar una gran labor de apostolado a través de internet.
Un venerable español
Por otra parte, el Papa ha aprobado las virtudes heroicas del siervo de Dios Ismael Molinero Novillo, Ismael de Tomelloso, laico nacido el 1 de mayo de 1917 en Tomelloso y muerto en Zaragoza el 1 de mayo de 1938.
