El Diario Oficial de Nicaragua, denominado La Gaceta, ha publicado este miércoles una resolución del Ministerio de Gobernación, que dirige la ministra María Amelia Coronel Kinloch, por la cual se cancela la personalidad jurídica de la Compañía de Jesús en el país.
El régimen de Daniel Ortega justifica esta nueva medida por el supuesto «incumplimiento de leyes». Entre ellos, dice que no reportó informes del estado financiero correspondientes a los ejercicios de 2020, 2021 y 2022 y que el mandato de la junta directiva está vencido desde 2020.
También acusa a los jesuitas de falta de transparencia y de que la entidad competente desconocía las actividades que lleva a cabo y la ejecución de sus proyectos y si estos cumplían los fines establecidos.
Por todo ello, además de la cancelación de la personalidad jurídica, ha decidido confiscar todos sus bienes y ponerlos a nombre del Estado de Nicaragua.
Esta decisión llega una semana después de que el Gobierno tomase el control de la Universidad Centroamericana (UCA), expulsando, además, a los jesuitas que allí desempeñaban su servicio. La acusaba de ser «centro de terrorismo».
Es una agresión más del régimen contra la Iglesia, que desde el primer momento se ha posicionado en favor de los derechos vulnerados de los nicaragüenses. Así, son numerosos los sacerdotes que han tenido que exiliarse y hay un obispo en la cárcel desde hace un año, Rolando Álvarez.