Un texto del Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, resume las intenciones del Papa para la celebración del XLV «Encuentro por la Amistad entre los Pueblos», que tendrá lugar en Rímini en un contexto de «tiempos complejos».
Se acerca la celebración del «Encuentro para la amistad entre los pueblos», cuya XLV edición tendrá lugar en Rímini del 20 al 25 de agosto. Para inspirar sus preparativos, el Papa Francisco ha enviado al Obispo de Rímini, Monseñor Nicolò Anselmi un mensaje bajo el tema «Si no buscamos lo esencial, ¿qué buscamos?» que ha sido recogido en un texto firmado por el Cardenal Secretario de Estado Pietro Parolin.
El texto, recogido la Oficina de Prensa de El Vaticano, subraya que, «precisamente ahora que atravesamos tiempos complejos, la búsqueda de lo que constituye el centro del misterio de la vida y de la realidad reviste una importancia crucial».
Por eso, continúa el mensaje, «el Papa Francisco anima a intentar buscar, con pasión y entusiasmo, lo que hace resaltar la belleza de la vida, respondiendo a la pregunta que se planteaba don Luigi Giussani cuando afirmaba con valentía: ‘El corazón se rompe por la esclerosis, es decir, por la pérdida de la pasión y del gusto de vivir. […] La vejez a los veinte años e incluso antes, la vejez a los quince, esta es la característica del mundo de hoy’».
Desde el inicio de su pontificado, recuerda el Cardenal Secretario Pietro Parolin, «el Papa Francisco nos exhorta a leer incluso las resistencias, fatigas y caídas de los hombres y mujeres de hoy como una llamada a la reflexión, para que el corazón se abra al encuentro con Dios y cada uno tome conciencia de sí mismo, del prójimo y de la realidad».
En ese sentido, el texto recuerda el Discurso a la Plenaria del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, 26 de enero de 2024, en el que el Papa Francisco nos recuerda que «lo esencial, lo más bello, lo más atractivo y al mismo tiempo lo más necesario para nosotros es la fe en Cristo Jesús».
Aunque, matiza el Cardenal Secretario de Estado, «volver a lo esencial que es Jesús no significa huir de la realidad, sino que, por el contrario, es la condición para sumergirse verdaderamente en la historia, para afrontarla sin huir de sus desafíos, para encontrar el coraje de arriesgar y amar incluso cuando parece que no vale la pena, para vivir en el mundo sin ningún miedo».
En este espíritu, «el Santo Padre aprecia y comparte el objetivo del próximo Encuentro, porque centrarnos en lo esencial nos ayuda a tomar nuestra vida en nuestras manos y hacer de ella un instrumento de amor, misericordia y compasión, convirtiéndonos en signo de bendición para el prójimo». Ante la tentación del desánimo, la complejidad de la crisis actual y, en particular, el desafío de una paz que parece imposible, «exhorta a todos a convertirse en protagonistas responsables del cambio, colaborando activamente en la misión de la Iglesia, para dar vida juntos a lugares donde se pueda ver y tocar la presencia de Cristo».
En definitiva, el Cardenal Secretario de Estado recuerda que «el Papa Francisco espera que el rico programa del Encuentro, en la multiplicidad de propuestas y lenguajes, suscite en muchos el deseo de convertirse en buscadores de lo esencial y haga florecer en los corazones la pasión por el anuncio del Evangelio, fuente de liberación de toda esclavitud y fuerza que sana y transforma a la humanidad».
